¿Sabes la relación entre las manos y la boca en el momento en el que hablamos y en otros durante el día? ¿Alguna vez te has preguntado por qué tienes que mover tus manos cuando hablas y qué te hace mover la boca cuando solo usas las manos?
La ciencia tiene una explicación para esa tendencia que tenemos todos los seres humanos. Y la explicación viene desde nuestros ancestros. De acuerdo a las investigaciones, cuando éramos criaturas primitivas, las manos tomaban la comida y la boca estaba preparada para recibirla.
Según ese principio, si agarrabas algo grande, tu boca sabía que tenía que abrirse de par en par, y si era pequeño, no tanto. Así que desde ese entonces viene la conexión que ahora nos sorprende.
Otra razón para explicar la relación entre las manos y la boca tiene que ver con la ubicación en el cerebro de ambas zonas. Y esto es porque las partes del cerebro que controlan las manos y la boca están altamente superpuestas.
Esta realidad se puede ver cuando estamos concentrados en alguna labor manual y terminamos con la lengua afuera o haciendo gestos raros con la boca. Eso pudiera tener que ver incluso con el lenguaje no verbal que siempre nos acompaña y con la necesidad de expresar que no queremos interrupciones.
Otra de las comunicaciones originales que somos capaces de hacer tienen que ver con el momento en el que hablamos por teléfono. O con el modo en el que nos comunicamos cuando somos pequeños.
Las investigaciones demuestran que la relación entre las manos y la boca está más allá del lenguaje corporal. Y esto explicaría que usemos gestos cuando hablamos por teléfono y en la oscuridad. Ello significa que no movemos las manos para que nos entiendan, sino para entendernos nosotros mismos.
