A partir del 10 de diciembre quedan cancelados todos los vuelos de EEUU a los destinos de Cuba, con excepción de La Habana, como resultado de una nueva medida del gobierno de Donald Trump.
Según se conoció este viernes la agencia norteamericana de noticias Associated Press, el Departamento de Transporte anunció que los vuelos de las aerolíneas JetBlue y American Airlines a Santa Clara, Holguín y Camagüey estarán prohibidos a partir de esa fecha.
Esta directiva sucede a pedido del Departamento de Estado, de acuerdo a lo anunciado por las autoridades en un comunicado en el que especifican que la norma entrará en vigor en 45 días.
Los vuelos hacia La Habana siguen representando la gran mayoría de los vuelos desde Estados Unidos a Cuba y seguirán siendo legales.
Sin embargo, muchas personas toman esos vuelos, especialmente los cubanos residentes en Estados Unidos que visitan a sus familiares en Cuba.
Mike Pompeo pidió en una carta al Departamento de Transporte que suspendiera la autorización de vuelo para fortalecer las sanciones contra el Gobierno cubano.
Nuevas restricciones
Esto viene como continuidad a las recientes medidas que entraron en vigor para limitar la exportación de actividades aéreas y marítimas, y un mayor control de las donaciones que recibe Cuba de entidades foráneas.
Recientemente el Buró de Industria y Seguridad (BIS) del Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció nuevas enmiendas a las Regulaciones para la Administración de Exportaciones (EAR), que tienen el objetivo de restringir más las exportaciones y reexportaciones de bienes hacia Cuba.
Las restricciones aéreas, si bien no dificultan aún más los vuelos directos a Cuba, imposibilitan el alquiler o venta de aviones, partes o piezas, al gobierno cubano.
Hasta ahora eso dependía de una licencia general, pero con la nueva medida las licencias serán más restringidas. De hecho, se establece un tope, o sea, no serán satisfechos aquellos pedidos que contengan más de 10% de componentes estadounidenses.
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