La Franquicia del Miami Heat llegó con la expansión de la NBA en la Temporada 1988-1989.
Anteriormente la ciudad tuvo un equipo en la ABA conocido como los Floridanos, que heredó la franquicia de Minnesota Muskies y jugó en la Liga del balón tricolor, entre 1968 y 1972.
Pero hoy no vamos a referirnos a la historia del baloncesto en la Florida, ni en Miami, ni siquiera en la exitosa historia del Heat, hoy queremos recordar a quien fue el mejor anotador del equipo el año de su debut en la NBA.
Miami adquirió vía Draft a Kevin Edwards, procedente de la Universidad de DePaul en la posición número 20 del sorteo universitario.
Edwards fue titular desde el primer encuentro del Heat, celebrado el sábado 5 de noviembre de 1988, en la Miami Arena.
Fue una derrota 91-111 ante Los Ángeles Clippers y en la que Edwars marcó 14 puntos con 4 rebotes, siendo el máximo anotador del Heat en ese duelo Pearl Washington con 16 cartones.
El inicio de los floridanos fue duro, pues perdieron los primeros 17 encuentros de su historia, hasta que el 14 de diciembre y actuando de visitantes, ante el mismo rival en la Memorial Sports Arena de Los Ángeles, lograron su primer éxito con un triunfo 89-88, con Edwards marcando 12 puntos, con 3 rebotes y 3 robos de balón.
La primera victoria en casa y la segunda de la franquicia en su historia la conquistaron ante Utah Jazz el 23 de diciembre por 101-80.
Edwards se fue en esa fecha hasta los 18 puntos, con 3 rebotes y 8 asistencias, que hicieron estéril el esfuerzo ese día de Karl Malone 32 puntos y 9 rebotes y John Stockkton 13 unidades y 9 pases a canasta.
Fue una zafra larga para el Heat que terminaría con récord de 15 victorias y 67 fracasos.
En total el Shooting Guard o Escolta, jugó en esa campaña 79 encuentros, saliendo de titular en 62 y dejó un promedio de 13,8 puntos el mayor del Heat en su campaña de debut.
Se mantuvo en el Sur de la Florida hasta el ejercicio 1992-1993, en esas cinco temporadas en Miami. Promedió 12,2 puntos, tres rebotes y 3,2 asistencias.
En total jugó 604 encuentros en el mejor basketball del mundo, promediando 10,9 unidades.
Su mejor temporada, fue la primera fuera de Miami 1993-1994, cuando en los entonces Nets de Nueva Jersey, jugó por única vez en su carrera los 82 encuentros de la temporada con promedios de 14 anotaciones por encuentro, 3,4 rebotes, 2,8 asistencias y 1,5 robos.
Además jugó con Orlando y con los entonces Grizzlies de Vancouver, equipo con el cual se retiró, tras dos campañas en el dique seco por una grave lesión, en 2000-2001.
Sus mayores virtudes como jugador eran ser un buen defensor y su habilidad para penetrar en la zona pintada y llegar al Aro.
Tras su retiro se dedicó a entrenar a equipos universitarios.
