Solamente si hablamos de los hoteles de Cuba, es ya una realidad que han dejado de venderse en el mundo algunos emblemáticos como el Nacional, Capri, Habana Libre, Kawama (Varadero) y San Carlos (Cienfuegos). Todo porque están envueltos en situaciones legales y reclamaciones.
Este es solo uno de los problemas que afecta al turismo en la Isla actualmente. Recientemente el ministro del sector dio a conocer que, mientras en la década de 2008-2018 el país creció en un 100,2 por ciento en la entrada de turistas a Cuba, en junio se redujo en un 20 por ciento.
Ahora no hay ningún barco operando en el país, dijo el ministro. Y alertó que esta situación debe afectar también a las aerolíneas debido a que muchas temen a las implicaciones de sus viajes a la Isla.
Para este año se pronostica un decrecimiento del 10 por ciento en la entrada de turistas a la Isla. Además, varias agencias de venta del mundo han sido multadas por vender paquetes al país.
¿Qué pasa con los hoteles de Cuba?
Debido a esta realidad, ya no se venden los hoteles de Cuba, y es más probable que quienes llegan al país se queden en casas particulares de renta.
Todo esto se suma al hecho de que en las ciudades turísticas cubanas existen más habitaciones de renta en estos alojamientos privados que en las instalaciones hoteleras.
Las autoridades cubanas revelaron también que ahora llegan menos turistas desde Francia, Alemania, Reino Unido, Italia y España, y este mercado ha disminuido en un 14 por ciento.
Sin embargo, los planes son que sigan creciendo los hoteles de Cuba. Para este año se inaugurarán 3 mil 808 habitaciones, y se recuperarán 2 mil 404, sobre todo en La Habana.
También se espera la inauguración de hoteles de Cuba como el Iberostar Albatros de Holguín, y Encantos en La Habana, Sancti Spiritus, Camagüey, Gibara y Santiago de Cuba.
En el polo de Cayo Guillermo se abrirán Muthu Cayo Guillermo y otra instalación de Kempinski. Y el primer hotel de Cayo Cruz, que será de la cadena española H-10.
El ministro reconoció que en los hoteles de Cuba deben mejorarse cuestiones como los precios, los alimentos, el confort, las tiendas y, sobre todo, la renta de autos, asunto grave en los últimos tiempos.
