Desde el pasado 6 de mayo, cuando la explosión del hotel Saratoga sorprendió a todos los cubanos, nos preguntamos cómo sucedió el siniestro.
Las autoridades desde el inicio descartaron la posibilidad de una bomba. Y, si bien no tienen toda la información confirmada de cómo ocurrió, afirman que se trata de un accidente debido al suministro de gas licuado que se estaba realizando en la instalación hotelera en el momento de la explosión.
A partir de esa premisa, hay entonces muchas interrogantes que llegan relacionadas con lo ocurrido en el Saratoga. ¿Por qué la bala de gas licuado del petróleo del camión suministrador no explotó?, es una de ellas.
Según explica el profesor Carlos del Porto en su muro de Facebook —y citado por Cubadebate—, el accidente parece tener origen en un escape de gas en algún punto entre la línea de abastecimiento (manguera) o la fuente receptora (la bala de gas del hotel).
El gas comenzó a escapar y se concentró en el interior del Saratoga. Estos hoteles tienen muchos locales cerrados, lo cual propicia altas concentraciones.
Saratoga: ¿qué vino luego de la concentración del gas?
Luego, alguna fuente de ignición (interruptor, relay de un refrigerador, una fuente incandescente) pudo ser suficiente para que la masa de gas acumulada en el hotel llegara a deflagrar.
Esto sucede pronto, en un instante. Se enciende y se consume pero no deja grandes incendios tras de sí ni grandes llamaradas que se prolonguen en el tiempo. ¿La razón? El gas acumulado se consume y quema.
De ahí que la onda expansiva sale y lo hace por todos los elementos más fáciles de desprender en una edificación. Por eso se observan intactos los entrepisos del Saratoga y la estructura de fachada o cierre derrumbada. Estas son los puntos más ligeros de la construcción.
De acuerdo con el profesor Carlos del Porto, la cisterna de gas del camión está intacta —a la vista— porque está al aire libre. Entonces el gas no se concentra. Además, está fuera del área de salida de la onda expansiva.
