Saltar al contenido

Hirofumi Daimatsu, el Arquitecto de las “Niñas Magas del Oriente” en Tokyo 1964.

13 febrero, 2024

Cubatel continúa con su Serie de Trabajos rumbo a los Juegos Olímpicos de París 2024.

Muchos hablan del gran triunfo de la Selección Femenina de Voleibol de Japón en los Juegos Olímpicos de 1964 y su espectacular juego, sin embargo no muchos recuerdan a Hirifumi Daimatsu, el arquitecto de aquel gran equipo.

Daimatsu nació el 12 de febrero de 1912 y jugó voleibol desde muy joven, incluso en la Universidad Kwansei Gakuin, pero tras graduarse fue llamado al Servicio Militar en el que alcanzó grados de Comandante de una Escuadra del Ejército Imperial.

Tras la “Segunda Guerra Mundial” y la derrota de Japón, en 1953 se convirtió en Entrenador del equipo femenino de la fábrica textil Nichibo Kaizuka.

Por aquel entonces el voleibol adquiría en Japón una gran popularidad, aunque se jugaba una modalidad de 9 jugadores, la que fue mutando y muchos dicen que gracias a Dimatsu al modo tradicional.

En Nichibo implantó métodos de entrenamiento que limitaban con la “tortura” como el kaiten reeshibu” ( “rotar y recibir”), tomado del judo, que consiste en tirarse al suelo para defenderse del golpe del oponente y luego inmediatamente girar sobre uno mismo para recuperar la posición y poder recibir el balón, técnica que el entrenador requiere para repita tantas veces hasta que los atletas ya no puedan levantarse y estén al borde de las lágrimas.

Así con una disciplina espartana, las chicas se levantaban de madrugada, trabajaban en la Fábrica y en la tarde comenzaban los entrenamientos que habitualmente se extendían hasta media noche, convirtió al equipo en el mejor de Japón y poco a poco en la Selección Nacional del país.

Así con su severo entrenamiento llegó a conquistar 175 triunfos consecutivos, incluido el oro olímpico en la primera aparición del voleibol en citas estivales, en Tokyo 1964.

Allí derrotaron en la final a la Unión Soviética por 3 sets a 0 y parciales de 15-11. 15-8 y 15-13.

Dos años antes con las soviéticas de locales, habían conseguido su primer oro mundial, derrotándolas 3-1 en la final, a lo que hay que agregar la medalla de plata obtenida en el Mundial de 1960 en Brasil.

Daimatsu convirtió a Japón en el mejor equipo del planeta en menos de una década y revolucionó los métodos de entrenamiento.

Para los japoneses ese equipo encarnaba el espíritu de sacrificio en busca de conseguir el máximo objetivo.

Aunque fue muy criticado en algunos sectores, sus jugadoras siempre salieron en su defensa, diciendo que ellas aceptaron entrenar y jugar con sus métodos.

Tras subir a lo más alto del olimpo, Daimatsu se retiró, tal vez también agotado por sus métodos de entrenamientos, y se dedicó a la política, siendo electo a la Cámara en 1968 por el Partido Liberal Democrático.

Falleció el 24 de noviembre de 1978, en el año 2000 fue seleccionado para formar parte del Hall de la Fama del Voleibol Mundial.

5/5 - (5 votos)