El teatro más grande del mundo estuvo en Cuba, pero hace muchos, muchos años. Y es que el actual Karl Marx, otrora Teatro Blanquita, se robó este título tras su apertura en el año 1949.
Con una gran pista de patinaje de hielo sobre su escenario, este coloso teatral marcó la vida cultural de La Habana a inicios de la década del 50.
De acuerdo con Anuario 1948, suplemento del diario El País de aquella época, el teatro Blanquita contó además con 6 600 lunetas y una cafetería para 200 clientes.
Por ese entonces, este recinto superó en 500 asientos al Radio City Hall, de Nueva York, por solo poner un ejemplo.
Entre las estrellas que desfilaron por ese teatro estuvo Sarita Montiel, quien en alguna ocasión, impresionada por el tamaño de ese coloso, expresó: “Me siento pequeñita. La sala es tan grande que puede volar un avión”.
El nombre del teatro por aquel entonces era en honor al de la esposa del senador de la República, Alfredo Hornedo Suárez.
Por razones económicas, el cierre de este coliseo se produjo en 1955.
A inicios de la década del 60, el Blanquita se convirtió en el Teatro Charles Chaplin. Luego, sería rebautizado como Teatro Karl Marx, el 17 de diciembre de 1975.
Desde entonces, este teatro que alguna vez fue el más grande del mundo ha recibido a importantes figuras de talla internacional.
Por su escenario han desfilado Joan Manuel Serrat, Fito Páez, Álvaro Torres, Diego El Cigala, entre otros importantes artistas.
Desde su fundación, contó con la presencia de Agustín Lara, Rita Montaner, Antonio y Manolo Paso, Benny Moré, la orquesta de Pérez Prado, el Royal Ballet de Londres, y el Ballet Nacional de Cuba, entre otros.
El actual Teatro Karl Marx está ubicado en calle 1era. y 10, Miramar.
