Hay, en la provincia de Villa Clara, un poblado al que todos llaman la Venecia tropical. Su verdadero nombre es Isabela de Sagua y, si bien no tiene las románticas góndolas ni los mosaicos bizantinos ni los característicos techos rojos, está rodeada de agua por todas partes.
Además, la hospitalidad de sus lugareños es un plus para querer recorrer este territorio que pertenece al municipio de Sagua la Grande.
La circulación en esta Venecia tropical es a través de puentes de madera, los cuales ofrecen un mayor atractivo al poblado costero que tiene una forma semejante a una península.
Este territorio forma parte, además, de lo que para el año 1988 se llamó el realengo de Las Congojas.
Pero de ¿dónde surgió el nombre que tiempo después recibió esta Venecia tropical?
Ese es un dato que ni sus habitantes pueden dar con total certeza. Se cuenta que los marineros a la hora de partir del puerto, hace más de un siglo, gritaban “Isa La Vela”.
Otras versiones de la historia relatan que el nombre de este poblado es un homenaje a Isabel de Castilla. Recordemos que la famosa reina española fue quien autorizó el viaje de Cristóbal Colón en 1492, dando lugar al “descubrimiento” del continente americano.
El puerto de esta Venecia tropical abrió comercialmente en 1844. Y, cuenta la leyenda, que corrían tiempos de esplendor para el poblado en esa época.
En los muelles atracaban ocho buques a la vez. Así que imaginarán las grandes cantidades de mercancías que llegaban hasta los almacenes de este hermoso poblado.
Se dice que Isabela de Sagua llegó a acoger a 300 barcos en un año, y 42 buques en un día.
Esta afluencia de barcos quedó truncada luego de 1959, cuando la ruptura de relaciones con los Estados Unidos imposibilitó las importaciones.
Foto: Tomada de Cubacute.
