La primera vacuna contra el coronavirus podría estar lista para otoño. Así lo reconocieron especialistas de la Universidad de Oxford en Gran Bretaña, quienes completan estudios sobre este intento de solución para acabar con el virus.
De acuerdo a las declaraciones de estos expertos, existen 546 voluntarios dispuestos a servir en esta primera fase. Con ellos se comenzará muy pronto. Después pasarán al ensayo clínico con niños y personas de entre 65 y 80 años.
La gran incertidumbre sobre esta vacuna contra el coronavirus es la duración de su protección al cuerpo humano. Se estudiarán entonces las reacciones del organismo para ver cuántos anticuerpos se generan y cómo reacciona el sistema inmune.
Otro detalle importante es la calidad de esta protección. Se requiere que los anticuerpos sean constantes en la sangre para declarar que el medicamento es efectivo, apuntaron los expertos.
Después de las primeras fases de prueba de la vacuna contra el coronavirus de la Universidad de Oxford, en junio comenzará un amplio estudio con alrededor de 5 mil personas. Siempre en dependencia de los resultados de cada etapa.
La Unión Europea apoya el trabajo de estos científicos y persigue que mayor cantidad de personas se sometan a las pruebas. En dependencia de los resultados positivos, podrá producirse al por mayor y comenzar a salvar vidas y normalizar el funcionamiento del planeta.
La británica no es la única vacuna contra el coronavirus que se probará en humanos por estos días. Desde España, los científicos de esa nación anunciaron el principio de esa fase para la semana próxima. La idea es comenzar con los cultivos celulares para ver su desempeño inmunológico.
Los expertos advierten que no siempre se logra el producto ideal en el primer intento. Por eso hay que preservarse de esperanzas exageradas. Pero vale alegrarse por los intentos.
