La reaparición del pescado en la canasta básica de Cuba, de forma liberada pero “controlada”, se ha convertido en un fenómeno viral en todas las redes sociales. Carteles, tablas de precio, memes, hacen la más sincera crítica a la llegada del ¿difunto? animal, y revive la polémica entre la gente.
Y no es para menos, pues en medio de la crisis de alimentos y el desabastecimiento latente, se anuncia la entrega de UN pescado por cada tres personas. Y y en aquellos núcleos familiares de 7 o más, solo tocarán TRES ejemplares marinos.
Eso por una parte, y por otra, el precio de la libra del pescado completo, incluyendo cabeza y cola, resulta bastante elevado. Sobre todo teniendo en cuenta las carencias y necesidades nutricionales cada vez mayores ante la poca variedad de alimentos.
Esto significa que los cubanos tendrán que rifarse el animalito en cada hogar. Si este mes te tocó la cabeza, el que viene podrías aspirar a un filetico… hasta que termines en la cola.
Las normas de entrega advierten que, tras 48 horas de llegado el pescado a las carnicerías, se pierde el derecho a comprarlo, sin reclamaciones. Entonces se comienza a expender de forma “liberada” pero solo hasta DOS ejemplares por núcleo.
Pues sí, regresó el pescado a Cuba. Ese alimento de mar que en la Isla se había convertido en un manjar exótico ahora vuelve a la revancha con su homólogo el pollo, y lo hace también, por qué no, para “tranquilidad” de los avestruces.
